
El par GBP/USD pierde impulso cerca de 1.3485 durante la sesión europea temprana del lunes, presionado por la renovada demanda del Dólar estadounidense (USD). El potencial a la baja para un par mayor podría estar limitado, ya que el Banco de Inglaterra (BoE) guió que la política monetaria seguirá un camino gradual a la baja.
El Comité de Política Monetaria del BoE decidió recortar un cuarto de punto en su tasa de interés de referencia al 3.75% en su reunión de diciembre, el primer recorte desde agosto pasado. El gobernador Andrew Bailey dijo durante la conferencia de prensa que es probable que las tasas continúen en un camino gradual a la baja, pero "cuánto más avanzamos se convierte en una decisión más difícil" con cada recorte.
En cuanto al USD, los operadores anticipan dos recortes de tasas por parte de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) en 2026 debido a un enfriamiento del mercado laboral y una inflación en descenso. Los mercados financieros están valorando en casi un 18.3% las probabilidades de que el banco central de EE.UU. reduzca las tasas de interés en su próxima reunión de política en enero, según la herramienta FedWatch de CME. Firmes apuestas dovish de la Fed podrían pesar sobre el Dólar y crear un viento de cola para el par en el corto plazo.
En el gráfico diario, el GBP/USD cotiza en 1.3486. La EMA de 100 días avanza y el precio se mantiene por encima de ella, preservando la tendencia alcista a medio plazo. Un retroceso encontraría soporte dinámico en este promedio, manteniendo intacto el sesgo más amplio. El RSI se sitúa en 66 (alcista) tras haber bajado de máximos recientes, apuntando a un fuerte impulso sin señal de sobrecompra. El soporte inicial se encuentra en la banda media de Bollinger en 1.3393, con la EMA de 100 días por debajo en 1.3336. Mantenerse por encima de esta zona mantendría los descensos contenidos y favorecería el lado superior.
Las Bandas de Bollinger se desplazan hacia arriba, con el precio arraigado en la mitad superior y acercándose a la banda superior en 1.3547, indicando una presión alcista persistente sin estar sobreextendido. Las bandas se han ampliado modestamente en las últimas sesiones, señalando un impulso firme. Un cierre por encima de esa barrera abriría el camino para una extensión, mientras que un rechazo dejaría espacio para una consolidación hacia la banda inferior en 1.3240.
(El análisis técnico de esta historia fue escrito con la ayuda de una herramienta de IA)
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d. C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de cambio de divisas (FX) más comercializada en el mundo, representando el 12% de todas las transacciones, con un promedio de 630 mil millones de $ al día, según datos de 2022. Sus pares comerciales clave son GBP/USD, que representa el 11% de FX, GBP/JPY (3%) y EUR/GBP (2%). La Libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria decidida por el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en si ha logrado su objetivo principal de "estabilidad de precios": una tasa de inflación constante de alrededor del 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intentará controlarla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para las personas y las empresas. Esto es generalmente positivo para la libra esterlina, ya que los tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores globales inviertan su dinero. Cuando la inflación cae demasiado es una señal de que el crecimiento económico se está desacelerando. En este escenario, el Banco de Inglaterra considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas se endeudarán más para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden afectar el valor de la libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Otro dato importante que se publica y afecta a la Libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo