El Peso mexicano (MXN) comenzó la semana con pérdidas de alrededor del 0.58% frente al Dólar estadounidense (USD) en una semana crucial con la Reserva Federal (Fed) preparándose para celebrar su reunión de política monetaria el 7 de mayo y el anuncio de los datos de inflación de México. Al momento de escribir, el USD/MXN se cotiza en 19.67.
Los participantes del mercado continuaron digiriendo noticias relacionadas con el comercio de EE.UU., con Washington señalando posibles acuerdos con India, Corea del Sur y Japón. Aunque el presidente de EE.UU., Donald Trump, dijo que China quiere un acuerdo "muy desesperadamente", la falta de confirmación de Pekín sobre el inicio de las discusiones mantiene a los inversores en alerta.
La agenda económica de México el lunes estuvo ausente, con los operadores pendientes de la publicación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de abril el 8 de mayo. En marzo, la inflación se situó en 3.8% interanual y el IPC subyacente en 3.64%. Aunque los precios se mantuvieron dentro del rango del 3% más o menos 1% del Banco de México (Banxico), una nueva re-aceleración ejercería presión sobre Banxico, que inició un ciclo de relajación.
En otras noticias, Reuters reveló que la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el presidente de EE.UU., Donald Trump, discutieron una incursión militar estadounidense en México para combatir a los cárteles de drogas. Sin embargo, Sheinbaum rechazó la oferta, diciendo en un evento: "Podemos trabajar juntos, pero ustedes en su territorio y nosotros en el nuestro."
Al otro lado de la frontera, el Instituto de Gestión de Suministros (ISM) reveló que la actividad de servicios mejoró en abril. Un subcomponente de la lectura sugirió que las empresas estadounidenses informaron un aumento en los Precios Pagados.
El USD/MXN también sigue siendo sensible a los cambios en el ánimo del mercado. Los operadores están atentos a la política monetaria de la Fed, con expectativas de que el banco central de EE.UU. mantenga las tasas sin cambios. Sin embargo, los operadores están pendientes del tono del presidente de la Fed, Jerome Powell, en la conferencia de prensa posterior a la reunión.
La tendencia a la baja del USD/MXN se mantiene intacta, pero parece que el par ha encontrado su pie, tocando fondo cerca del rango de 19.46–19.50, con los vendedores incapaces de empujar los precios a la baja. Los compradores están ganando impulso, como lo refleja el Índice de Fuerza Relativa (RSI); por lo tanto, una prueba de la SMA de 200 días en 19.98 está en el horizonte. Una ruptura de esta última expondrá la marca de 20.00, seguida por la SMA de 100 días en 20.26.
Por el contrario, si el USD/MXN cae por debajo de 19.46, podría exacerbar una caída hacia la marca de 19.00, antes del soporte convertido en resistencia del 28 de junio en 18.59.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.