Investing.com -- El lunes, el sector tecnológico del S&P 500 se desplomó un 5,5%, marcando el mayor descenso en un solo día de ese índice desde 2020.
La mayor parte de la caída se registró en compañías que se esperaban como fundamentales en la expansión de la IA, tales como las empresas de semiconductores y servicios públicos responsables de los centros de datos. No obstante, el índice S&P 500 en su conjunto retrocedió solo un 1,5%, lo que no representa la mayor pérdida de este mes, y aproximadamente el 70% de las empresas que lo componen vieron un repunte en el valor de sus acciones.
"Creemos que es demasiado pronto para decir si esto es el comienzo de una caída para las grandes empresas estadounidenses que más se han beneficiado de la publicidad de la IA hasta ahora, pero si lo fuera, ¿qué significaría para el S&P 500?", se pregunta James Reilly, economista jefe de mercados de Capital Economics.
"Nuestro sentimiento es que el índice podría caer este año, pero que el valor promedio de sus componentes podría mantenerse bastante bien", añadió.
Reilly sugiere que los inversores podrían empezar a centrarse más en los "usuarios" de la tecnología de IA en lugar de en los "facilitadores", lo que reflejaría una rotación similar a la que ocurrió en el sector de TI durante la burbuja de las puntocom en 1999/2000. Esta rotación no impidió que el S&P 500 tuviera un buen rendimiento en ese período.
"En última instancia, los avances recientes no han cuestionado el papel transformador de la IA; más bien, han generado un debate sobre quién se beneficiará más de posibilitar la revolución de la IA", señala Reilly.
En este contexto, el S&P 500 podría seguir avanzando, incluso si se pierde confianza en estas antiguas favoritas.
Capital Economics también estableció paralelismos con el estallido de la burbuja de las puntocom en el año 2000, en el que el valor medio del S&P 500, representado por un índice ponderado por igual, se mantuvo relativamente estable hasta el inicio de la recesión estadounidense.
Esta perspectiva histórica indica que la empresa media del S&P 500 podría seguir obteniendo buenos resultados si el telón de fondo económico sigue siendo positivo, a pesar de la posible corrección de las valoraciones y expectativas de beneficios de las empresas de "gran tecnología" muy implicadas en la IA.
El reciente repunte del mercado se ha concentrado especialmente en las empresas más grandes del S&P 500. Las 100 principales empresas tienen un peso similar en el mercado. Las 100 primeras empresas tienen un peso similar al que tenían en 2000, pero las 10 primeras tienen ahora una cuota mayor que nunca.
"Esto podría significar que las pérdidas que se produzcan al deshacerse estas ganancias se concentrarán de forma similar, ofreciendo un amplio margen para que la empresa media del S&P 500 obtenga buenos resultados si el contexto económico sigue siendo positivo, como esperamos", explicó Reilly.
En otras palabras, el economista sostiene que si el rally de la IA llegara a su fin, podría arrastrar al S&P 500 ponderado por capitalización bursátil, de forma similar a lo ocurrido en 2000. Sin embargo, esto no necesariamente derribaría a la empresa media dentro del índice.