El Yen japonés (JPY) opera bajo una presión moderada frente al Dólar estadounidense (USD) el martes, con el USD/JPY recortando pérdidas anteriores mientras el Dólar se mantiene firme ante datos económicos estadounidenses estables y la retórica cautelosa de la Reserva Federal (Fed).
En el momento de escribir, el USD/JPY se cotiza alrededor de 147.80 durante las horas de negociación estadounidenses después de haber caído brevemente a un mínimo intradía de 147.51. Mientras tanto, el Índice del Dólar estadounidense (DXY), que sigue el Dólar frente a una cesta de seis divisas principales, se encuentra cerca de 97.38 mientras los operadores esperan los comentarios del presidente de la Fed, Jerome Powell, programados para las 16:35 GMT, en busca de nuevas pistas sobre la política monetaria.
Los mercados financieros japoneses estaban cerrados más temprano en el día por el feriado del Equinoccio de Otoño, lo que limitó la actividad durante las horas asiáticas. Los volúmenes de negociación se normalizaron en las sesiones europea y estadounidense, dejando al par principalmente impulsado por la dinámica del Dólar y las señales de la Fed.
En EE.UU., el Índice Compuesto de Gerentes de Compras (PMI) de S&P Global se redujo a 53.6 en septiembre, por debajo de las previsiones de 54.6 y bajando desde 54.6 en agosto. La manufactura se mantuvo en 52.0, mientras que los servicios imprimieron 53.9, ambos señalando un impulso más lento pero aún firmemente en expansión. Los datos sugieren que, aunque el impulso se ha enfriado, la economía de EE.UU. continúa expandiéndose a un ritmo constante.
El economista jefe de S&P Global, Chris Williamson, señaló que, aunque los aranceles siguen elevando los costos de insumos tanto en manufactura como en servicios, menos empresas pueden aumentar los precios de venta para compensarlos. Dijo que esto sugiere que los márgenes de las empresas están siendo presionados, pero también apunta a una posible moderación en las presiones inflacionarias.
El Dólar también recibió apoyo de los comentarios cautelosos de los funcionarios de la Fed. El presidente de la Fed de Chicago, Austan Goolsbee, agregó que, aunque las tasas podrían bajar si la inflación continúa disminuyendo, no está considerando movimientos más grandes de 50 puntos básicos, describiendo la política actual como solo ligeramente restrictiva.
Por el lado japonés, el Banco de Japón (BoJ) mantuvo la política sin cambios en su reunión de la semana pasada, pero las expectativas de un aumento en octubre están aumentando gradualmente. ING ahora coloca la probabilidad de un movimiento en alrededor del 52%, ya que los mercados se preparan para que el banco central actúe más pronto que tarde. La atención también se centrará en los PMIs preliminares de Jibun Bank que se publicarán el miércoles, seguidos por las minutas de la reunión del BoJ el jueves, que podrían ofrecer más pistas sobre las perspectivas de política.
La política monetaria de Estados Unidos está dirigida por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de los precios y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos objetivos es ajustar los tipos de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Reserva Federal, ésta sube los tipos de interés, incrementando los costes de los préstamos en toda la economía. Esto se traduce en un fortalecimiento del Dólar estadounidense (USD), ya que hace de Estados Unidos un lugar más atractivo para que los inversores internacionales coloquen su dinero. Cuando la inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Reserva Federal puede bajar los tipos de interés para fomentar el endeudamiento, lo que pesa sobre el billete verde.
La Reserva Federal (Fed) celebra ocho reuniones al año, en las que el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) evalúa la situación económica y toma decisiones de política monetaria. El FOMC está formado por doce funcionarios de la Reserva Federal: los siete miembros del Consejo de Gobernadores, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York y cuatro de los once presidentes de los bancos regionales de la Reserva, que ejercen sus cargos durante un año de forma rotatoria.
En situaciones extremas, la Reserva Federal puede recurrir a una política denominada Quantitative Easing (QE). El QE es el proceso por el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Es una medida de política no estándar utilizada durante las crisis o cuando la inflación es extremadamente baja. Fue el arma elegida por la Fed durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos de alta calidad de instituciones financieras. El QE suele debilitar al Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso a la QE, por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a instituciones financieras y no reinvierte el capital de los bonos que tiene en cartera que vencen, para comprar nuevos bonos. Suele ser positivo para el valor del Dólar estadounidense.