En noviembre de 2024, los ingresos fiscales en España alcanzaron cerca de 280.000 millones de euros, lo que representa un incremento del 8% en comparación con el mismo mes del año anterior. Este crecimiento en la recaudación es crucial para que el Gobierno cumpla con el compromiso de reducir el déficit al 101,3% del PIB para 2026, mientras aumenta el techo de gasto en un 3,2%. Para lograr esto, el crecimiento económico y la mayor recaudación de impuestos son fundamentales.
El informe de la IGAE muestra que, hasta noviembre de 2024, los ingresos no financieros del Estado totalizaron 305.020 millones de euros, un 5,7% más que en 2023. En términos de impuestos directos e indirectos, la recaudación alcanzó 271.895 millones, un aumento interanual del 8,3%. La AIReF prevé que la cifra final de crecimiento para el año será del 8,1%, impulsada principalmente por estimaciones superiores de recaudación en todos los impuestos, destacando el IRPF.
El IRPF incrementó su participación en el PIB al 8,1% en 2024, con una recaudación de más de 128.000 millones de euros. En términos interanuales, creció un 7,6%, favorecido por mayores retenciones de trabajo y capital. Para el impuesto de sociedades, la AIReF proyecta un incremento al 2,5% del PIB en 2024, mientras que el IVA mejorará su peso al 5,7%. Las cotizaciones sociales también aumentarán al 12,6% del PIB, apoyadas por un escenario macroeconómico favorable.
De cara a 2025, el Gobierno anticipa mayores ingresos fiscales. Se espera un incremento en el IVA de alimentos básicos y un retorno al 21% del IVA en la electricidad. Estas medidas buscan elevar los ingresos del 42,6% al 42,9% del PIB. Con un aumento previsto en los impuestos directos e indirectos, el objetivo es cumplir con las exigencias fiscales de Europa.