REENVÍO-Ignorando los temores a una burbuja de IA, los inversores apuestan por Nvidia y Google para impulsar las acciones de Taiwán hasta un récord

Por Faith Hung y Rae Wee

TAIPEI/SINGAPUR, 12 dic (Reuters) - Los grandes valores tecnológicos de Taiwán muestran pocos signos de ralentizar su recuperación, incluso cuando la preocupación por la burbuja de la inteligencia artificial ensombrece los mercados mundiales, lo que subraya la confianza local en las ventajas estructurales de la inteligencia artificial que los inversores extranjeros pueden haber pasado por alto.

El índice de referencia de Taiwán .TWII está a punto de superar el récord de 30.000 puntos en 2026, según los inversores, ampliando una subida de tres años que ha visto al mercado de valores casi duplicarse a medida que la isla se sube a una ola de demanda de chips que impulsan la inteligencia artificial.

Mientras el dinero extranjero se preocupa por las elevadas valoraciones de la IA, los inversores taiwaneses se han volcado con entusiasmo en el mercado.

Los analistas afirman que los inversores nacionales apuestan por la posición única de Taiwán como eje de una cadena de suministro de IA, en la que incluso el aumento de la competencia en el sector sólo beneficiaría a las empresas taiwanesas, incluida TSMC 2330.TW, el mayor fabricante de chips por contrato del mundo.

Uno de los principales focos de ansiedad en torno a la IA proviene de la incertidumbre sobre la capacidad de Nvidia para mantener su dominio del mercado, con las unidades de procesamiento tensorial de Google (TPUs) emergiendo como una alternativa potencialmente más rentable a las unidades de procesamiento gráfico de Nvidia (GPUs).

Pero Taiwán sale ganando porque la isla es esencial para las cadenas de suministro de GPU y TPU, los componentes básicos de la potencia de cálculo de la IA.

"Taiwán es uno de los principales beneficiarios del mercado de la IA", afirma Piter Yang, gestor de fondos de Fuh Hwa Securities Investment Trust Co, citando la ventaja de ser el centro mundial de semiconductores.

Y por ahora, mientras un futuro prometedor alimenta el optimismo, los mercados taiwaneses y los inversores locales parecen relativamente tranquilos ante los temores de una burbuja de IA, del mismo modo que mantienen la calma ante las crecientes tensiones geopolíticas con Pekín, que a menudo han asustado a los inversores extranjeros.

POR AHORA NO HAY PREOCUPACIÓN POR LA BURBUJA DE LA IA

Las ganancias del mercado taiwanés también se han visto respaldadas por el crecimiento de los beneficios, lo que le ha dejado con una relación precio/beneficios razonablemente estable de 21, por debajo de la del Nasdaq .IXIC y el Nikkei, lo que significa que el repunte no ha encarecido las acciones.

"No nos preocupa que se produzca una burbuja de IA", afirmó Li Fang-kuo, presidente de la división de inversión en valores del conglomerado alimentario Uni-President 1216.TW. "Nos sentimos cómodos con la situación de las valoraciones"

Li señaló que varias de las siete magníficas empresas estadounidenses tienen márgenes brutos de hasta el 70% o más. "Así que no es comparable a la burbuja de las puntocom, cuando las empresas no generaban beneficios significativos"

Goldman Sachs comparte la opinión. "El contexto actual del sector no constituye una burbuja en toda regla", afirmaban sus estrategas en un informe de investigación de este mes, añadiendo que siguen sobreponderando las acciones tecnológicas.

No cabe duda de que existen otras preocupaciones en torno a la IA, principalmente la rentabilidad, que podría debilitar la demanda de hardware fabricado en Taiwán.

Pero la importancia de Taiwán en la cadena de suministro y la solidez de la cartera de pedidos significa que las empresas tecnológicas de la isla todavía tienen más años para hacer caja, según los analistas y los inversores.

Los estrategas de Goldman esperan que la inversión en hiperescaladores crezca significativamente en 2026 y 2027, hasta 552.000 y 644.000 millones de dólares. Predicen que el índice más amplio de Taiwán podría alcanzar los 30.200 puntos en los próximos 12 meses, un 7% más que los niveles actuales.

Li, de Uni-President, prevé que el principal índice de Taiwán alcance los 30.000 puntos en la primera mitad del próximo año, liderado por TSMC, Foxconn 2317.TW, Elite Material 2383.TW y otros actores de la cadena de suministro de IA.

"De cara a 2026, la historia de la demanda estructural en torno a la IA y los semiconductores de gama alta se mantiene intacta, lo que sugiere que el sector puede seguir siendo un beneficiario clave a largo plazo", afirmó Gina Kim, gestora de cartera de renta variable de mercados emergentes de Nordea Asset Management en Singapur.

HUIDA DE LOS INVERSORES EXTRANJEROS

Las acciones taiwanesas han alcanzado máximos históricos a lo largo del año y han subido un 22% en 2025, siguiendo el ritmo del índice Nasdaq .IXIC, de gran peso tecnológico.

Sin embargo, van a la zaga del Kospi surcoreano .KS11, el Hang Seng de Hong Kong .HSI y el Nikkei japonés entre las principales bolsas asiáticas con mejor comportamiento este año.

Esto se ha producido a pesar de las ventas de los inversores extranjeros, que han vendido acciones taiwanesas por un valor neto de 533.800 millones de dólares taiwaneses (17.000 millones de dólares estadounidenses) en lo que va de año, tras unas salidas netas de unos 695.100 millones de dólares taiwaneses en 2024, según mostraron los datos de la bolsa.

El éxodo se ha visto impulsado por las incertidumbres comerciales, algunas preocupaciones sobre los riesgos de la IA y la búsqueda de beneficios por parte de los inversores, según los analistas, que señalan que la confianza en Taiwán sigue siendo optimista.

Los estrategas de HSBC señalaron en una nota de este mes que la cartera asiática media tiene un 10% en un solo valor, TSMC, y aconsejaron a los inversores diversificar más allá de las apuestas masificadas por la IA.

"Seguimos confiando en que Taiwán es una parte insustituible de la cadena de suministro de la IA", afirmó Kieron Kader, gestor de cartera asociado de la gestora de activos londinense Alquity.

"La proximidad del ecosistema a TSMC crea un foso competitivo muy difícil de replicar"