ANÁLISIS-Las aerolíneas estadounidenses afrontan las consecuencias del cierre a medida que se acerca Acción de Gracias

Por Rajesh Kumar Singh

CHICAGO, 11 nov (Reuters) - El cierre más prolongado del gobierno federal ha interrumpido decenas de miles de vuelos en los últimos días y, con ello, las optimistas expectativas de las aerolíneas estadounidenses para el trimestre navideño. Ahora, se debaten entre cómo minimizar las repercusiones en los viajeros y en su cuenta de resultados, ya que parece que el Gobierno reabrirá a finales de semana.

Los transportistas esperaban que la demanda se mantuviera estable este trimestre después de que las reservas de viajes corporativos y de ocio sufrieran (link) en la primera mitad de 2025 debido a las preocupaciones económicas y las tensiones comerciales (link). Pero el crecimiento de las reservas para las próximas vacaciones de Acción de Gracias se ha reducido a la mitad, en torno al 1%, desde finales de octubre, según la empresa de análisis de la aviación Cirium, lo que refleja la inquietud de los viajeros ante la prolongación del cierre.

El Senado de EE.UU. aprobó el lunes un proyecto de ley (link) para restablecer la financiación de las agencias federales, lo que aumenta la posibilidad de que el cierre pueda terminar esta semana, y la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, estudiará la medida en los próximos días.

Los responsables del sector advierten de que es probable que las interrupciones operativas persistan incluso después de la reapertura del gobierno. El transporte aéreo se vio relativamente poco afectado durante las primeras semanas del cierre, con algo más de 4.000 cancelaciones registradas entre el 1 de octubre y el 5 de noviembre, según datos del sitio web de seguimiento de vuelos FlightAware. Sin embargo, esa cifra se disparó a más de 8.000 vuelos cancelados sólo en los últimos cuatro días, y la Administración Federal de Aviación ha ordenado cortes progresivos de vuelos (link) en 40 aeropuertos principales.

Las interrupciones generalizadas e impredecibles de los vuelos hacen que los pilotos y auxiliares de vuelo alcancen los límites de tiempo de servicio establecidos por el gobierno federal antes de completar sus rutas. Esta situación, unida a la inmovilización de aviones y tripulantes en aeropuertos equivocados, obliga a las compañías aéreas a buscar rápidamente sustitutos para evitar más retrasos.

Para gestionar la situación, aerolíneas como Delta DAL.N y United UAL.N han incentivado a los miembros de la tripulación de determinadas bases para que trabajen en viajes adicionales, según mensajes del personal vistos por Reuters. Un portavoz de United Airlines confirmó que la compañía está utilizando ofertas de primas más extensas esta semana para los pilotos y también ha extendido incentivos similares a los auxiliares de vuelo en algunas de sus bases.

Las compañías también están utilizando tripulaciones de reserva, es decir, personal que se mantiene a la espera de circunstancias imprevistas. El agotamiento de esta reserva podría provocar importantes trastornos durante las vacaciones de Acción de Gracias, una de las épocas del año de mayor actividad para las compañías aéreas, según las autoridades. El largo fin de semana de Acción de Gracias comienza el 27 de noviembre.

"Lo que hagamos hoy es importante porque va a influir en cómo se desarrolle el resto del mes", dijo en una entrevista Steve Olson, vicepresidente senior de operaciones de sistemas y aeropuertos de JetBlue JBLU.O.

EFECTOS EN EL SECTOR

La reciente debilidad sigue a un declive más amplio de los viajes en Estados Unidos. Los billetes de avión vendidos a través de agencias de viajes estadounidenses para viajar hasta finales de noviembre cayeron un 10% interanual el mes pasado, según Airlines Reporting Corp.

"Todo el mundo en el sector está un poco preocupado por el cuarto trimestre", dijo a Reuters Steve Johnson, director de estrategia de American Airlines AAL.O.

El mes pasado, American calculó una pérdida de ingresos de menos de un millón de dólares al día por el cierre, similar a la de su rival Delta. Desde entonces, sin embargo, las interrupciones han ido en aumento.

Aunque los recortes de vuelos se han producido durante un periodo de escasez de viajes, Daniel McKenzie, analista de Seaport Research Partners, calcula que las reducciones del 10% impuestas por la FAA costarían al sector unos 10 millones de dólares diarios. Si los recortes se mantienen hasta Acción de Gracias, los costes podrían ascender a 45 millones de dólares diarios, sin incluir los ingresos perdidos por los viajes aplazados y las reservas de última hora que se espera que se evaporen.

Las aerolíneas de bajo coste, como Frontier ULCC.O y Allegiant ALGT.O, se enfrentan a un mayor riesgo de pérdida de ingresos por los recortes de vuelos, debido a la menor frecuencia de los mismos y a la menor capacidad para reacomodar a los pasajeros. American, Delta y United, que operan más vuelos en determinadas rutas, podrían beneficiarse del negocio derramado por las aerolíneas de ultra bajo coste, dijo McKenzie.

Aunque la FAA tiene previsto reanudar sus operaciones con normalidad una vez que se recupere la financiación y la sobrecarga del sistema deje de ser una preocupación, ese plazo sigue sin estar claro.