
Por Maria Cheng y Andrea Shalal
WASHINGTON, 7 oct (Reuters) - El presidente Donald Trump prometió el martes tratar a Canadá de manera justa en las negociaciones sobre los aranceles estadounidenses a sus productos, pero se mostró menos comprometido con el acuerdo comercial de Norteamérica, que también incluye a México.
Las declaraciones de Trump llegan apenas una semana después de que el representante de Comercio de Estados Unidos, Jamieson Greer, asegurara que las conversaciones comerciales de Estados Unidos con Canadá y México serán probablemente bilaterales en el futuro, más que trilaterales, un cambio en la administración republicana al embarcarse en la revisión del TMEC.
"Creo que van a salir muy contentos", dijo Trump, refiriéndose a Canadá, en declaraciones en el Salón Oval antes de una reunión con el primer ministro Mark Carney para hablar de comercio. "Vamos a tratar a la gente de forma justa. Especialmente vamos a tratar a Canadá con justicia".
El ministro canadiense responsable del comercio bilateral afirmó posteriormente que ambas partes habían logrado avances durante lo que calificó como una conversación satisfactoria, positiva y sustantiva con Trump, al tiempo que dejó claro que aún no se había llegado a ningún acuerdo.
"Estoy feliz y satisfecho porque creo que ahora tenemos un impulso que no teníamos cuando nos levantamos esta mañana (...) pero aún no hemos terminado nuestro trabajo", declaró Dominic LeBlanc a periodistas.
Carney, que realiza su segunda visita a la Casa Blanca en cinco meses, se encuentra bajo una creciente presión para abordar los aranceles estadounidenses sobre el acero, los automóviles y otros bienes que están perjudicando a la economía de Canadá.
"(Las conversaciones) nos dejaron con la sensación de que existe el deseo de ver cómo podemos, empezando por los sectores del acero y el aluminio, estructurar algo que redunde en beneficio de los intereses económicos y de seguridad de ambos países", afirmó LeBlanc.
RENEGOCIACIÓN DEL TMEC O ACUERDOS BILATERALES
Carney respondió inicialmente a los aranceles impulsando un acuerdo comercial y de seguridad separado con Estados Unidos, pero a medida que las conversaciones mostraban problemas, cambió su atención a una revisión del TMEC prevista para 2026.
"Podemos renegociarlo, y eso sería bueno, o podríamos hacer tratos diferentes", dijo Trump. "Podríamos hacer tratos que sean mejores para cada uno de los países".
Al ser consultado por su preferencia, respondió: "Me da igual. Quiero hacer lo que sea el mejor acuerdo para este país, y también teniendo muy presente a Canadá".
Más tarde, el subsecretario de Comercio Exterior mexicano, Luis Rosendo Gutiérrez, buscó restar importancia a los dichos de Trump.
"Tengo confianza que el tratado va a seguir existiendo entre los tres países, y de eso estamos platicando en las mesas de negociación", dijo durante un evento público.
"Desde hace 30 años los temas en nuestro acuerdo de libre comercio entre los tres países se han dado en muchas ocasiones de manera bilateral y luego se acuerdan los tres países y llegan a un consenso en los temas", agregó el funcionario.
En marzo, Carney asumió el cargo de primer ministro de Justin Trudeau, quien tenía una relación notoriamente mala con Trump.
Carney y Trump han destacado desde entonces su buena relación.
"Desde el principio, me cayó bien y hemos tenido una buena relación", dijo Trump.
"Tenemos conflictos naturales. También nos tenemos cariño mutuo (...) saben que nos queremos mucho", añadió.
Canadá envía el 75% de todas sus exportaciones a Estados Unidos y es particularmente vulnerable a las medidas comerciales de su vecino del sur. México, por su parte, envía el 85% de sus exportaciones a su vecino del norte, su mayo socio comercial.
"Hay áreas en las que competimos, y es en esas áreas donde tenemos que llegar a un acuerdo que funcione. Pero hay más áreas en las que somos más fuertes juntos, y en eso estamos centrados", dijo Carney.
El primer ministro visitó el Despacho Oval por última vez en mayo, cuando afirmó sin rodeos que Canadá jamás estaría en venta, en respuesta a la reiterada amenaza de Trump de comprar o anexar Canadá.
Desde entonces, ha hecho numerosas concesiones, incluyendo el levantamiento de algunos aranceles y la eliminación de un impuesto a los servicios digitales dirigido a las empresas tecnológicas estadounidenses.