Por Andrew Chung
25 sep (Reuters) - La gobernadora de la Reserva Federal Lisa Cook instó el jueves a la Corte Suprema de Estados Unidos a rechazar el intento de Donald Trump de despedirla, diciendo a los jueces que la medida sin precedentes del presidente republicano destruiría la independencia del banco central y perturbaría los mercados.
Los abogados de Cook presentaron una respuesta por escrito oponiéndose a la solicitud de emergencia del Departamento de Justicia del 18 de septiembre para levantar la orden de una jueza federal que impedía a Trump de destituir inmediatamente a Cook, designada por el expresidente demócrata Joe Biden, mientras su desafío legal continúa.
Acceder a la petición de Trump, dijeron sus abogados a la Corte Suprema, "alteraría drásticamente el statu quo, ignoraría siglos de historia y transformaría a la Reserva Federal en un organismo supeditado a la voluntad del presidente".
La jueza de distrito Jia Cobb, en Washington, dictaminó el 9 de septiembre que las afirmaciones de Trump de que Cook cometió fraude hipotecario antes de asumir el cargo, acusaciones que Cook niega, probablemente no eran motivo suficiente para la destitución en virtud de la ley de 1913 que creó la Fed.
La Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia en un fallo de 2-1 el 15 de septiembre negó la solicitud de la administración para poner la orden de Cobb en suspenso, dictaminando que a Cook probablemente se le denegó el debido proceso en violación de la Quinta Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.
En la presentación del jueves, los abogados de Cook dijeron que la "historia única de independencia" de la Fed ha ayudado a hacer de la economía estadounidense la más fuerte del mundo.
Ponerse del lado de Trump, escribieron, "señalaría a los mercados financieros que la Reserva Federal ya no goza de su independencia tradicional, arriesgando el caos y la interrupción".
Cook, la primera mujer negra en ocupar el cargo de gobernadora de la Fed, demandó a Trump en agosto después de que el presidente anunció que la destituiría.
Cook ha dicho que las acusaciones presentadas por Trump contra ella no daban al presidente la autoridad legal para destituirla y eran un pretexto para despedirla por su postura en política monetaria.
Previamente el jueves, un grupo de 18 exfuncionarios de la Reserva Federal de Estados Unidos, secretarios del Tesoro y otros que sirvieron bajo presidentes de ambos partidos instaron a la Corte Suprema en un escrito a rechazar la petición de Trump de permitir su intento de despedir a Cook.
El grupo incluía a los tres últimos presidentes de la Fed -Janet Yellen, Ben Bernanke y Alan Greenspan-, así como a los ex secretarios del Tesoro Henry Paulson, Lawrence Summers, Jacob Lew, Timothy Geithner y Robert Rubin.
Argumentaron que dejar que el presidente destituya a Cook mientras su desafío legal a la acción de Trump está en curso amenazaría la independencia del banco central y erosionaría la confianza pública en él.