Por Humeyra Pamuk
WASHINGTON, 7 ago (Reuters) - La Administración del presidente Donald Trump ha dado instrucciones a los diplomáticos estadounidenses en Europa para que lancen una campaña de presión con el fin de crear una oposición a la Ley de Servicios Digitales (DSA, por sus siglas en inglés) de la Unión Europea, que según Washington reprime la libertad de expresión e impone costes a las empresas tecnológicas estadounidenses, según muestra un cable diplomático interno al que tuvo acceso Reuters.
En un cable del Departamento de Estado fechado el 4 de agosto y firmado por el secretario de Estado estadounidense Marco Rubio, la agencia afirmaba que la UE estaba aplicando restricciones "indebidas" a la libertad de expresión con sus esfuerzos por combatir el discurso de odio, la desinformación y la información errónea, y que la DSA estaba reforzando aún más estas restricciones.
La DSA de la UE es una ley histórica que pretende hacer el entorno en internet más seguro y justo obligando a los gigantes tecnológicos a hacer más para abordar el contenido ilegal, incluido el discurso de odio y el material de abuso sexual infantil.
Trump ha hecho de la lucha contra la censura, en particular frente a la supuesta represión de las voces conservadoras en internet, uno de los temas principales de su Gobierno. Altos responsables estadounidenses, incluido el vicepresidente JD Vance, se han centrado en los dirigentes y las regulaciones europeas, acusándolos de "censurar" a los estadounidenses, una acusación que la Unión Europea rechaza.
El cable, cuyo titular lo describía como una "solicitud de acción", encargaba a los diplomáticos estadounidenses de las embajadas de EEUU en Europa que se comprometieran regularmente con los gobiernos de la UE y las autoridades de servicios digitales para transmitir las preocupaciones de EEUU sobre el DSA y los costes financieros para las empresas tecnológicas estadounidenses.
"Las misiones deben centrar sus esfuerzos en conseguir el apoyo del Gobierno anfitrión y de otras partes interesadas para derogar o modificar la DSA o las leyes nacionales o de la UE que restringen la expresión en internet", decía el cable en su sección "objetivo", refiriéndose a las misiones diplomáticas de Estados Unidos.
En él se ofrecían sugerencias concretas a los diplomáticos estadounidenses sobre cómo podría modificarse la ley de la UE y los temas de conversación para ayudarles a argumentar en ese sentido.
El Departamento de Estado no hizo comentarios para este artículo. La oficina de la jefa de tecnología de la UE, Henna Virkkunen, no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
En marzo, los responsables antimonopolio y de tecnología de la Unión Europea dijeron a los legisladores estadounidenses que la nueva norma tecnológica pretendía mantener abiertos los mercados digitales y no iba dirigida a los gigantes tecnológicos estadounidenses.
La Comisión también se ha opuesto a las especulaciones sobre la posibilidad de incluir en las negociaciones entre la UE y EEUU el emblemático régimen regulador de la tecnología de los Veintisiete. "Nuestra legislación no se modificará. La DMA y la DSA no están sobre la mesa en las negociaciones comerciales con Estados Unidos", declaró el portavoz de la Comisión, Thomas Regnier, en una rueda de prensa diaria.