Investing.com — El director ejecutivo de JPMorgan Chase (NYSE:JPM), Jamie Dimon, advirtió de que las crecientes tensiones comerciales, los altos déficits fiscales y la inestabilidad geopolítica podrían desencadenar una inflación sostenida, volatilidad en los mercados e incertidumbre económica.
En una carta anual a los accionistas muy esperada, publicada el lunes, Dimon señaló que los nuevos aranceles anunciados por Estados Unidos corren el riesgo de convertirse en "la gran gota que colme el vaso" para la economía global.
"Si el conjunto de aranceles causa o no una recesión sigue siendo una incógnita, pero ralentizará el crecimiento", escribió.
Señaló que, aunque algunos ven razones legítimas para estas medidas, los efectos a corto plazo podrían ser inflacionarios.
"Es probable que veamos resultados inflacionarios, no solo en bienes importados sino en precios domésticos, a medida que aumentan los costos de insumos y crece la demanda de productos nacionales".
Dimon destacó la incertidumbre en torno a posibles acciones de represalia, la confianza de los inversores, los beneficios corporativos y la fortaleza del dólar estadounidense.
"Cuanto antes se resuelva este problema, mejor", dijo, advirtiendo que el daño acumulativo podría ser difícil de revertir.
También reiteró su preocupación por el creciente déficit fiscal de Estados Unidos, calificándolo como "el nivel más alto en tiempos de paz que no está impulsado por necesidades recesivas".
Dimon advirtió que la trayectoria actual del gasto deficitario, junto con la contracción cuantitativa, aumenta la incertidumbre en torno a los tipos de interés y las valoraciones de activos.
"Nuestra economía también enfrenta los efectos desconocidos de la contracción cuantitativa... nunca hemos tenido tanta expansión cuantitativa y, por lo tanto, contracción cuantitativa antes", dijo, añadiendo que esta dinámica podría conducir a una mayor volatilidad del mercado del Tesoro.
Dimon señaló que las presiones inflacionarias persisten a pesar de la reciente moderación.
"La mayoría de lo que veo en el futuro es inflacionario", escribió, citando la remilitarización, las demandas de infraestructura y las estructuras comerciales cambiantes.
Sobre los tipos de interés, enfatizó que mientras la Reserva Federal controla las tasas a corto plazo, los rendimientos a largo plazo siguen impulsados por las expectativas de inflación y los flujos de capital globales.
"Este tira y afloja puede continuar durante algún tiempo", dijo, advirtiendo sobre el riesgo de repetir una estanflación al estilo de los años 70.
A pesar de estos desafíos, Dimon expresó confianza en la resiliencia a largo plazo de la economía estadounidense.
"Incluso con resultados bastante extremos, nuestra compañía seguiría siendo saludable", dijo. "Todavía tengo una fe inquebrantable en Estados Unidos: la fuerza excepcional de nuestra economía innovadora y nuestra resiliencia".
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