
El Índice del Dólar estadounidense (DXY), que rastrea el Dólar frente a una cesta de divisas, lucha por consolidar la recuperación de la semana pasada desde su nivel más bajo desde principios de agosto y opera con un leve sesgo negativo durante las primeras horas de la sesión europea del lunes. El Índice se sitúa actualmente justo por encima de los 98.00, con una caída de más del 0.10% en el día, y por ahora, parece haber interrumpido una racha ganadora de tres días hacia un máximo de una semana, alcanzado el viernes.
La media móvil simple (SMA) de 100 días se ha aplanado en 98.61 tras un aumento previo, con el precio ahora ligeramente por debajo de ella. Esta alineación mantiene un leve sesgo bajista ya que la media actúa como resistencia a corto plazo. Un cierre diario por encima de la SMA de 100 días aliviaría la presión, mientras que la incapacidad para recuperarla mantiene los riesgos a la baja en juego. El DXY se mantiene por debajo de la SMA de 100 días, que ha comenzado a inclinarse, manteniendo un tono defensivo. La lenta deriva en la pendiente de la media destaca una falta de fuerza en la tendencia, y el índice manteniéndose por debajo de ella preserva la presión.
Mientras tanto, la línea de Convergencia/Divergencia de Medias Móviles (MACD) se mantiene por debajo de la línea de señal y por debajo de cero, aunque ha estado subiendo, sugiriendo una presión bajista que se desvanece. El impulso del MACD mejora a medida que la línea asciende hacia la marca de cero, pero un cruce alcista aún no se ha materializado. Además, el Índice de Fuerza Relativa (RSI) se sitúa en 42.99, por debajo de la línea media de 50, reflejando un impulso moderado. Una recuperación hacia 50 podría estabilizar el tono. Un quiebre decisivo por encima de la SMA de 100 días en 98.61 cambiaría el enfoque hacia el alza, mientras que la falla allí mantendría a los vendedores en control.
(El análisis técnico de esta historia fue escrito con la ayuda de una herramienta de IA)
El Dólar estadounidense (USD) es la moneda oficial de los Estados Unidos de América, y la moneda "de facto" de un número significativo de otros países donde se encuentra en circulación junto con los billetes locales. Según datos de 2022, es la divisa más negociada del mundo, con más del 88% de todas las operaciones mundiales de cambio de divisas, lo que equivale a una media de 6.6 billones de dólares en transacciones diarias. Tras la Segunda Guerra Mundial, el USD tomó el relevo de la libra esterlina como moneda de reserva mundial.
El factor individual más importante que influye en el valor del Dólar estadounidense es la política monetaria, que está determinada por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de precios (controlar la inflación) y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos dos objetivos es ajustar las tasas de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Fed, ésta sube los tipos, lo que favorece la cotización del dólar. Cuando la Inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Fed puede bajar las tasas de interés, lo que pesa sobre el Dólar.
En situaciones extremas, la Reserva Federal también puede imprimir más dólares y promulgar la flexibilización cuantitativa (QE). La QE es el proceso mediante el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Se trata de una medida de política no convencional que se utiliza cuando el crédito se ha agotado porque los bancos no se prestan entre sí (por miedo al impago de las contrapartes). Es el último recurso cuando es poco probable que una simple bajada de las tasas de interés logre el resultado necesario. Fue el arma elegida por la Fed para combatir la contracción del crédito que se produjo durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos del gobierno estadounidense, principalmente de instituciones financieras. El QE suele conducir a un debilitamiento del Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a las instituciones financieras y no reinvierte el capital de los valores en cartera que vencen en nuevas compras. Suele ser positivo para el dólar estadounidense.