El Yen japonés (JPY) atrae a algunos vendedores al inicio de una nueva semana y detiene su fuerte movimiento de recuperación desde un mínimo de cuatro meses alcanzado frente a su contraparte estadounidense el viernes. El Banco de Japón (BoJ) reconoció la semana pasada la incertidumbre sobre el impacto económico de los aranceles estadounidenses del 15% más altos sobre las exportaciones japonesas y señaló una continua paciencia en su política. A esto se suma la incertidumbre política interna que podría complicar aún más el camino de normalización de la política del BoJ, lo que resulta ser un factor clave que socava al JPY durante la sesión asiática.
Mientras tanto, el desalentador informe de empleo de EE.UU. del viernes reavivó las preocupaciones económicas en EE.UU. y moderó el apetito de los inversores por activos más arriesgados, lo que es evidente en un tono más débil en los mercados de valores y podría ofrecer apoyo al JPY de refugio seguro. El Dólar estadounidense (USD), por otro lado, podría tener dificultades para ganar tracción significativa en medio de las apuestas por una reanudación inminente del ciclo de recortes de tasas de la Reserva Federal (Fed) en septiembre. Esto podría contribuir a limitar cualquier movimiento adicional de apreciación para el par USD/JPY y justifica la cautela para los alcistas.
La ruptura y cierre del viernes por debajo del nivel de retroceso de Fibonacci del 38.2% del repunte desde el mínimo de julio se vio como un desencadenante clave para los bajistas del USD/JPY. Sin embargo, los osciladores en el gráfico diario, aunque se han retirado de niveles más altos, aún se mantienen en territorio positivo. Esto, a su vez, ayuda al par de divisas a encontrar algo de soporte antes del nivel de retroceso del 50%, que se sitúa cerca de la región de 146.80-146.75 y debería actuar como un punto clave. Una ruptura sostenida por debajo del mencionado soporte debería allanar el camino para una caída hacia el nivel de 146.00 en ruta hacia la zona de 145.85, o el nivel de retroceso del 61.8% de Fibonacci.
Por el contrario, cualquier recuperación subsiguiente es más probable que enfrente un obstáculo inmediato cerca del nivel de 148.00, por encima del cual el par USD/JPY podría subir hasta la barrera horizontal de 148.60. El movimiento posterior podría elevar los precios al contado hasta el nivel de 149.00, o el nivel de retroceso del 23.6% de Fibonacci. Una fortaleza sostenida más allá de este último cambiará la tendencia a favor de los operadores alcistas y permitirá que el par de divisas recupere el nivel psicológico de 150.00 con alguna resistencia intermedia cerca de la región de 149.50, o la muy importante media móvil simple (SMA) de 200 días.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.