El Euro (EUR) se mantiene estable frente al Dólar estadounidense (USD) el jueves, después de que el Banco Central Europeo (BCE) mantuviera las tasas de interés sin cambios, como se esperaba ampliamente. El BCE mantuvo su tasa de facilidad de depósito en 2.00% y la tasa de operaciones principales de refinanciación en 2.15%, mientras mantiene un tono cauteloso y dependiente de los datos en medio de la persistente fortaleza del euro y la creciente incertidumbre comercial con los Estados Unidos (EE.UU.). Aunque la decisión de tasas estaba completamente descontada por los mercados, el euro se vio bajo una leve presión mientras la Unión Europea se apresura a finalizar un acuerdo comercial con Washington antes de la fecha límite autoimpuesta del 1 de agosto.
En el momento de escribir, el par EUR/USD está cotizando ligeramente a la baja, deteniendo una racha de cuatro días de ganancias y rondando 1.1735 durante las horas de negociación americanas. El retroceso del par refleja una mezcla de sentimiento cauteloso tras la pausa en la política del BCE y un Dólar estadounidense estable.
En su declaración oficial de política monetaria, el BCE señaló que la inflación ha regresado a su objetivo del 2% a medio plazo, y los recientes indicadores económicos sugieren una modesta resiliencia en toda la eurozona. Sin embargo, los responsables de políticas señalaron el aumento de los riesgos externos, más notablemente, las crecientes tensiones comerciales con EE.UU. y el impacto potencial de un euro más fuerte en la competitividad exportadora. El banco central enfatizó un enfoque dependiente de los datos, reunión por reunión, sin ofrecer ninguna guía explícita sobre el momento o la magnitud de futuros movimientos de política.
Durante su conferencia de prensa en Fráncfort, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, reiteró que los riesgos para la economía de la Eurozona siguen "inclinados a la baja", citando los aranceles estadounidenses reales y esperados más altos, el euro más fuerte y la continua incertidumbre geopolítica como factores clave que socavan la inversión empresarial y el crecimiento. Sobre las tensiones comerciales, Lagarde enfatizó que una resolución rápida podría "elevar el sentimiento y estimular la actividad", pero sin una resolución clara, el BCE permanecerá cauteloso.
El Índice del Dólar estadounidense (DXY), que rastrea el valor del Dólar frente a una cesta de divisas principales, está cotizando alrededor de 97.40 el jueves, mientras los inversores esperan los lanzamientos de datos económicos clave de EE.UU., incluyendo el Índice de Gerentes de Compras (PMI) preliminar y las Solicitudes Iniciales de Subsidio por Desempleo. Las cifras próximas podrían ofrecer nuevas perspectivas sobre la salud de la economía estadounidense y dar forma a las expectativas en torno al próximo movimiento de política de la Reserva Federal.
El Banco Central Europeo (BCE), con sede en Frankfurt (Alemania), es el banco de reserva de la zona euro. El BCE fija los tipos de interés y gestiona la política monetaria de la región.
El principal mandato del BCE es mantener la estabilidad de los precios, lo que significa mantener la inflación en torno al 2%. Su principal herramienta para lograrlo es subir o bajar los tipos de interés. Unos tipos de interés relativamente altos suelen traducirse en un Euro más fuerte, y viceversa.
El Consejo de Gobierno del BCE adopta las decisiones de política monetaria en reuniones que se celebran ocho veces al año. Las decisiones las adoptan los directores de los bancos nacionales de la zona del euro y seis miembros permanentes, entre ellos la presidenta del BCE, Christine Lagarde.
En situaciones extremas, el Banco Central Europeo puede poner en marcha una herramienta política denominada Quantitative Easing (relajación cuantitativa). El QE es el proceso por el cual el BCE imprime Euros y los utiliza para comprar activos (normalmente bonos del Estado o de empresas) a bancos y otras instituciones financieras. El resultado suele ser un Euro más débil..
El QE es un último recurso cuando es improbable que una simple bajada de los tipos de interés logre el objetivo de estabilidad de precios. El BCE lo utilizó durante la Gran Crisis Financiera de 2009-11, en 2015 cuando la inflación se mantuvo obstinadamente baja, así como durante la pandemia de coronavirus.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el reverso del QE. Se lleva a cabo después del QE, cuando la recuperación económica está en marcha y la inflación empieza a aumentar. Mientras que en el QE el Banco Central Europeo (BCE) compra bonos del Estado y de empresas a las instituciones financieras para proporcionarles liquidez, en el QT el BCE deja de comprar más bonos y deja de reinvertir el principal que vence de los bonos que ya posee. Suele ser positivo (o alcista) para el Euro.