El cruce EUR/GBP pierde tracción cerca de 0.8515 durante la sesión europea temprana del viernes. La Libra esterlina (GBP) se fortalece frente al Euro (EUR) a pesar de las crecientes preocupaciones sobre el mercado laboral del Reino Unido y una ligera desaceleración en las expectativas de inflación del consumidor. Los operadores se preparan para el informe de Confianza del Consumidor de la Eurozona, que se publicará más tarde el viernes.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo el jueves que la UE está lista para un acuerdo comercial con el presidente estadounidense Donald Trump. Sin embargo, las conversaciones sobre aranceles podrían fracasar y afirmó: "Todas las opciones están sobre la mesa".
El presidente francés Emmanuel Macron dijo a última hora del jueves que favorece un acuerdo comercial rápido y equitativo entre la UE y EE.UU. No obstante, si el arancel del 10% de EE.UU. se mantiene, Europa tomará represalias imponiendo un gravamen equivalente a las empresas estadounidenses. La incertidumbre sobre los aranceles provocada por Trump podría pesar sobre la moneda compartida a corto plazo.
Los datos preliminares del índice de gerentes de compras (PMI) de S&P Global de junio del Reino Unido, publicados a principios de esta semana, también respaldaron al GBP. El PMI compuesto del Reino Unido de S&P Global subió a 50.7 en junio desde 50.3 en mayo, por encima del consenso de 50.5. Mientras tanto, el sector de servicios, que domina la economía del Reino Unido, registró su crecimiento más rápido en tres meses y superó a sus contrapartes alemanas y francesas en junio. Esto, a su vez, eleva al GBP y actúa como un viento en contra para el cruce.
Sin embargo, el tono moderado del Banco de Inglaterra (BoE) podría limitar el potencial alcista del GBP. El gobernador del BoE, Andrew Bailey, advirtió a principios de esta semana que ya hay señales de que el mercado laboral del Reino Unido se está debilitando, y enfatizó su opinión de que es probable que las tasas de interés continúen cayendo.
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d. C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de cambio de divisas (FX) más comercializada en el mundo, representando el 12% de todas las transacciones, con un promedio de 630 mil millones de $ al día, según datos de 2022. Sus pares comerciales clave son GBP/USD, que representa el 11% de FX, GBP/JPY (3%) y EUR/GBP (2%). La Libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria decidida por el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en si ha logrado su objetivo principal de "estabilidad de precios": una tasa de inflación constante de alrededor del 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intentará controlarla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para las personas y las empresas. Esto es generalmente positivo para la libra esterlina, ya que los tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores globales inviertan su dinero. Cuando la inflación cae demasiado es una señal de que el crecimiento económico se está desacelerando. En este escenario, el Banco de Inglaterra considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas se endeudarán más para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden afectar el valor de la libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Otro dato importante que se publica y afecta a la Libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo