El Yen japonés (JPY) toca un mínimo de una semana, alrededor de la marca de 151.00 frente a su contraparte americana durante la sesión asiática del lunes, aunque la caída sigue siendo limitada en medio de las expectativas de un BoJ de línea dura. De hecho, los inversores han estado valorando la posibilidad de más aumentos de tasas de interés por parte del BoJ, lo que empujó el rendimiento del bono gubernamental japonés a 10 años (JGB) de referencia a su nivel más alto desde noviembre de 2009. Aparte de esto, la aparición de algunas ventas del Dólar estadounidense (USD) actúa como un viento en contra para el par USD/JPY.
Mientras tanto, el gobernador del BoJ, Kazuo Ueda, advirtió la semana pasada que la incertidumbre sobre los planes arancelarios del presidente estadounidense Donald Trump y su impacto en las perspectivas económicas globales requieren vigilancia en la fijación de la política monetaria. Esto, a su vez, está frenando a los alcistas del JPY a la hora de abrir nuevas posiciones y prestando cierto apoyo al par USD/JPY. Los operadores también parecen reacios y optan por esperar los importantes lanzamientos macroeconómicos de EE.UU. programados para el inicio de un nuevo mes, comenzando con el PMI manufacturero ISM más tarde durante la sesión norteamericana de este lunes.
Desde una perspectiva técnica, el par USD/JPY se detiene en el movimiento de recuperación de la semana pasada desde su nivel más bajo desde octubre de 2024 cerca del punto de ruptura horizontal de 151.00, ahora convertido en obstáculo. Además, los osciladores en el gráfico diario, aunque se han estado recuperando de niveles más bajos, aún se mantienen en territorio negativo. Esto, a su vez, sugiere que el camino de menor resistencia para los precios al contado sigue siendo a la baja. Por lo tanto, una caída posterior, de regreso hacia la marca psicológica de 150.00, parece una posibilidad distinta. Algunas ventas adicionales por debajo de la región de 149.80-149.75 se verán como un nuevo desencadenante para los operadores bajistas y arrastrarán al par de regreso hacia la marca de 149.00 en ruta hacia el área de 148.60-148.55, o el mínimo de varios meses.
Sin embargo, una fortaleza sostenida más allá de la marca de 151.00 podría desencadenar un rally de cobertura de cortos y elevar el par USD/JPY más allá de la resistencia intermedia de 151.70-151.75, hacia la cifra redonda de 152.00. El impulso podría extenderse aún más hacia la muy importante media móvil simple (SMA) de 200 días, actualmente situada cerca de la región de 152.40. Esta última debería actuar como un punto clave, que si se supera de manera decisiva, sugerirá que los precios al contado han tocado fondo y abrirá el camino para un movimiento de apreciación a corto plazo adicional.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.