El par GBP/USD se basa en sus recientes ganancias registradas en las últimas dos semanas y avanza a su nivel más alto desde marzo de 2022, en torno a la región de 1.3430 durante la sesión asiática del miércoles. Mientras tanto, el trasfondo fundamental sugiere que el camino de menor resistencia para los precios al contado es al alza, aunque las condiciones ligeramente sobrecompradas en el gráfico diario justifican cierta cautela para los operadores alcistas.
La Libra Esterlina (GBP) sigue encontrando apoyo en las expectativas de que el ciclo de recortes de tasas del Banco de Inglaterra (BoE) probablemente será más lento que en Estados Unidos (EE.UU.). De hecho, el gobernador del BoE, Andrew Bailey, dijo el martes que el camino para las tasas de interés será a la baja, aunque el progreso en esta dirección será lento y es poco probable que vuelvan a niveles ultra bajos sin grandes choques. En contraste, los mercados han estado valorando una flexibilización de la política más agresiva por parte de la Reserva Federal (Fed), lo que mantiene al Dólar estadounidense (USD) deprimido cerca del mínimo anual y actúa como un viento de cola para el par GBP/USD.
Según la herramienta FedWatch del CME Group, los mercados están valorando actualmente en más de un 75% la posibilidad de que la Reserva Federal recorte las tasas de interés en otros 50 puntos básicos en noviembre. A esto se suman los datos macroeconómicos más débiles de EE.UU. del martes, junto con el entorno de apetito por el riesgo predominante, que sigue debilitando al Dólar de refugio seguro y valida las perspectivas positivas a corto plazo para el par GBP/USD. Dicho esto, el Índice de Fuerza Relativa (RSI) en el gráfico diario ha superado la marca de 70, por lo que es prudente esperar una consolidación a corto plazo o un modesto retroceso antes de posicionarse para cualquier movimiento alcista adicional.
De cara al futuro, no se espera la publicación de datos económicos relevantes en el Reino Unido el miércoles. Dicho esto, un discurso programado de la miembro del MPC del BoE, Megan Greene, podría influir en el GBP y proporcionar algún impulso al par GBP/USD. Más tarde, durante la sesión temprana de América del Norte, los datos de ventas de viviendas nuevas de EE.UU. podrían contribuir a generar oportunidades de trading a corto plazo. Sin embargo, los operadores podrían abstenerse de realizar apuestas agresivas antes de los discursos de miembros influyentes del FOMC esta semana, incluido el presidente de la Fed, Jerome Powell, el jueves, y el índice de precios PCE de EE.UU. el viernes.
El Banco de Inglaterra (BoE) decide la política monetaria del Reino Unido. Su principal objetivo es lograr la estabilidad de los precios, es decir, una tasa de inflación constante del 2%. Su instrumento para lograrlo es el ajuste de las tasas básicos de préstamo. El BoE fija el tipo al que presta a los bancos comerciales y al que los bancos se prestan entre sí, determinando el nivel de los tipos de interés en la economía en general. Esto también influye en el valor de la Libra esterlina (GBP).
Cuando la inflación supera el objetivo del Banco de Inglaterra, éste responde subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para los ciudadanos y las empresas. Esto es positivo para la Libra esterlina, ya que unos tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores mundiales inviertan su dinero. Cuando la inflación cae por debajo del objetivo, es señal de que el crecimiento económico se está ralentizando, y el Banco de Inglaterra considerará la posibilidad de bajar los tipos de interés para abaratar el crédito con la esperanza de que las empresas pidan prestado para invertir en proyectos que generen crecimiento, lo que es negativo para la Libra esterlina.
En situaciones extremas, el Banco de Inglaterra puede aplicar una política denominada Quantitative Easing (QE). El QE es el proceso por el cual el BoE aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. El QE es una política de último recurso cuando la bajada de los tipos de interés no logra el resultado necesario. El proceso de QE implica que el Banco de Inglaterra imprima dinero para comprar activos, normalmente bonos del Estado o bonos corporativos con calificación AAA, de bancos y otras instituciones financieras. El QE suele traducirse en un debilitamiento de la Libra esterlina.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el reverso del QE, y se aplica cuando la economía se está fortaleciendo y la inflación empieza a subir. Mientras que en el QE el Banco de Inglaterra (BoE) compra bonos del Estado y de empresas a las instituciones financieras para animarlas a conceder préstamos, en el QT el BoE deja de comprar más bonos y deja de reinvertir el principal que vence de los bonos que ya posee. Suele ser positivo para la Libra esterlina.