El Peso mexicano se recuperó frente al Dólar el lunes. Los temores de que se aprobara la reforma judicial se desvanecieron después de que 43 senadores de la oposición reiteraran su voto en contra. El USD/MXN cotiza a 19.86, con una caída del 0.42%.
El par USD/MXN sigue siendo impulsado por cuestiones políticas. Sin embargo, el último informe de inflación justificó la postura moderada del Banco de México (Banxico) ya que las cifras generales y subyacentes disminuyeron en una lectura anual.
Otros datos mostraron que la confianza empresarial mejoró ligeramente pero se mantuvo por debajo del umbral de 50.
Mientras tanto, Julius Baer advirtió que las agencias de calificación podrían cambiar la solvencia crediticia de México tan pronto como el próximo año si se aprueba la reforma judicial. Erini Tsekeridou, analista de renta fija, dijo, "Aunque el impacto económico aún no está completamente claro, los mercados están preocupados por el posible debilitamiento del estado de derecho y la concentración del poder judicial y ejecutivo, lo que reduciría la supervisión y la rendición de cuentas."
Julius Baer se sumó a Morgan Stanley, Bank of America, JP Morgan, Citibanamex y Fitch en las advertencias sobre el impacto económico y financiero respecto a la aprobación de la reforma judicial.
Al otro lado de la frontera, la agenda económica de EE.UU. reveló las expectativas de inflación de los consumidores de la Fed de Nueva York, que se mantuvieron sin cambios en el 3%. Sin embargo, los participantes del mercado aún están atentos a la publicación del Índice de Precios al Consumo (IPC) de agosto el miércoles.
La tendencia alcista del USD/MXN se mantiene intacta a pesar del retroceso en curso por el alivio de que la reforma judicial no podría ser aprobada. Sin embargo, esto no se sabrá hasta el 11 de septiembre.
El impulso muestra signos de agotamiento, pero los compradores siguen a cargo a pesar de que el Índice de Fuerza Relativa (RSI) es ligeramente más bajo.
Si el USD/MXN supera 20.00, el próximo nivel de resistencia sería el máximo anual de 20.22. Con una mayor fortaleza, el par podría desafiar el máximo diario del 28 de septiembre de 2022 en 20.57. Si esos dos niveles se rinden, la próxima parada sería el máximo de oscilación en 20.82 el 2 de agosto de 2022, antes de 21.00.
Por el contrario, si el USD/MXN se debilita aún más, el primer soporte sería 19.50. Una ruptura de este último expondrá el mínimo de oscilación del 23 de agosto de 19.02 antes de dar paso a los vendedores que buscan probar la media móvil simple (SMA) de 50 días en 18.65.
El Banco de México, también conocido como Banxico, es el banco central del país. Su misión es preservar el valor de la moneda de México, el Peso mexicano (MXN), y fijar la política monetaria. Para ello, su principal objetivo es mantener una inflación baja y estable dentro de los niveles objetivo (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%).
La principal herramienta del Banxico para orientar la política monetaria es la fijación de tasas de interés. Cuando la inflación esté por encima del objetivo, el banco intentará controlarla aumentando las tasas, encareciendo el endeudamiento de dinero para los hogares y las empresas y enfriando así la economía. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que generan mayores rendimientos, lo que convierte al país en un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, tasas de interés más bajas tienden a debilitar al MXN. El diferencial de tasas con el Dólar, o cómo se espera que Banxico fije las tasas de interés en comparación con la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, es un factor clave.
Banxico se reúne ocho veces al año y su política monetaria está muy influenciada por las decisiones de la Reserva Federal estadounidense (Fed). Por lo tanto, el comité de toma de decisiones del banco central suele reunirse una semana después que la Reserva Federal. Al hacerlo, Banxico reacciona y en ocasiones anticipa las medidas de política monetaria fijadas por la Reserva Federal. Por ejemplo, después de la pandemia de Covid-19, antes de que la Fed subiera las tasas, Banxico lo hizo primero en un intento de disminuir las posibilidades de una depreciación sustancial del Peso mexicano (MXN) y evitar salidas de capital que pudieran desestabilizar al país.