
El GBP/USD continúa fortaleciéndose por segunda sesión consecutiva, cotizando alrededor de 1.2870 durante las horas asiáticas del viernes. La mejora del apetito por el riesgo, impulsada por una recuperación más fuerte de lo esperado en las ventas minoristas de EE.UU., ha aliviado las preocupaciones sobre una posible recesión en EE.UU. y ha impulsado a las divisas sensibles al riesgo como la Libra esterlina (GBP).
Además, la Libra esterlina ganó terreno debido a la publicación de datos económicos clave positivos el viernes, incluyendo los datos del Producto Interior Bruto (PIB) del Reino Unido. La economía del Reino Unido se expandió un 0.6% trimestral en el segundo trimestre, como se esperaba. Mientras tanto, el PIB aumentó un 0.9% interanual en el segundo trimestre frente al 0.9% esperado y el 0.3% registrado en el primer trimestre.
Los operadores esperan los datos de ventas minoristas del Reino Unido programados para su publicación el viernes, con expectativas de un repunte mensual a un aumento del 0.5% en julio, frente a la caída anterior del 1.2%. Además, se proyecta que el crecimiento anual aumente un 1.4%, revirtiendo la caída anterior del 0.2%.
El Dólar estadounidense (USD) se deprecia ya que los operadores descuentan completamente una reducción de tasas de 25 puntos básicos por parte de la Reserva Federal de EE.UU. para septiembre. Sin embargo, un recorte de 50 puntos básicos sigue siendo una posibilidad, con la herramienta CME FedWatch indicando una probabilidad del 26% de tal movimiento.
Sin embargo, el Dólar recibió soporte tras la publicación de cifras mejores de lo esperado en EE.UU. el jueves. La Oficina del Censo de EE.UU. informó que las ventas minoristas en EE.UU. subieron un 1.0% mensual en julio, un cambio brusco respecto a la caída del 0.2% en junio, superando el aumento proyectado del 0.3%. Además, las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo para la semana que terminó el 9 de agosto alcanzaron las 227.000, por debajo de la previsión de 235.000 y de las 234.000 de la semana anterior.
Además, el índice preliminar de sentimiento del consumidor de Michigan para agosto y los permisos de construcción para julio serán observados más tarde en la sesión norteamericana.
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d.C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de divisas más negociada del mundo, con un 12% de todas las transacciones y una media de 630.000 millones de dólares al día, según datos de 2022.
Sus pares de divisas clave son el GBP/USD, también conocido como "Cable", que representa el 11% del mercado de divisas, el GBP/JPY, o el "Dragón", como lo conocen los operadores (3%), y el EUR/GBP (2%). La libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria que decide el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en la consecución de su objetivo principal de "estabilidad de precios", es decir, una tasa de inflación estable en torno al 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés.
Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intenta contenerla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para particulares y empresas. Esto suele ser positivo para el GBP, ya que unos tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores mundiales aparquen su dinero.
Cuando la inflación es demasiado baja, es señal de que el crecimiento económico se está ralentizando. En este escenario, el BoE considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas pidan más prestado para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados calibran la salud de la economía y pueden influir en el valor de la Libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI manufactureros y de servicios, y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Una economía fuerte es buena para la Libra esterlina. No sólo atrae más inversión extranjera, sino que puede animar al Banco de Inglaterra a subir los tipos de interés, lo que fortalecerá directamente a la Libra esterlina. De lo contrario, si los datos económicos son débiles, es probable que la libra esterlina caiga.
Otro dato significativo para la libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un periodo determinado.
Si un país produce exportaciones muy solicitadas, su divisa se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que desean adquirir estos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa para una balanza negativa.