Decía: “La política del IRS es ilegal porque las recompensas en bloque son propiedades nuevas y, por lo tanto, no son “ingresos” en sí mismos. Más bien, cualquier pago recibido posteriormente por esos tokens cuando se venden es un ingreso. La política del IRS resulta en una sobreimposición injusta, problemas de cumplimiento y asfixia de la innovación”. En su declaración, el centro señaló que las estrictas leyes fiscales sobre recompensas en bloque podrían disuadir a muchos estadounidenses de utilizar criptomonedas y tecnología blockchain. Imponen una carga significativa a cualquiera que apueste por criptomonedas, obligándolos a trac de sus recompensas en bloque por impuestos que podrían no reflejar la realidad financiera actual, ya que el token aún no se ha vendido. Esto podría crear una “pesadilla de cumplimiento” que castigue la descentralización sobrecargando a un individuo por una propiedad recién creada. El centro hizo referencia a su análisis anterior que muestra la sobreimposición del IRS a las recompensas en bloque de Jarrett. Curiosamente, el grupo señaló que el Congreso ya está deliberando sobre el tema con un nuevo proyecto de ley presentado a la Cámara que aclarará cuándo se deben pagar los impuestos sobre los tokens. Sin embargo, señaló que la legislación podría tener que esperar hasta el próximo Congreso, para lo cual falta mucho tiempo, por lo que apoya los esfuerzos de Jarret. La nueva demanda contra el IRS se suma al creciente número de litigios contra los reguladores debido a la falta de claridad sobre múltiples cuestiones en el sector criptográfico. Más allá del IRS, el intercambio de derivados Bitnomial demandó recientemente a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) por afirmar que sus futuros XRP aún por cotizar están bajo su jurisdicción como valores. Según la compañía, el tribunal ya dictaminó que Ripple XRP no es un trac de inversión ni un valor. Por lo tanto, sólo la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC) debería tener voz sobre el producto. Si bien las diversas demandas destacan cómo los reguladores y las partes interesadas en las criptomonedas han recurrido a los tribunales en busca de claridad, las agencias estadounidenses también han obtenido importantes victorias financieras en algunas de las demandas. Hasta ahora, los reguladores han registrado 32 mil millones de dólares en acuerdos de empresas de cifrado. Los reguladores estadounidenses ven una participación cada vez mayor en demandas relacionadas con las criptomonedas