
Por Renee Hickman
CHICAGO, 1 abr (Reuters) - Los futuros de la soja en Chicago subían el martes antes de una reunión entre una coalición de grupos petroleros y de biocombustibles y la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos, para discutir el aumento de los mandatos federales para la mezcla de diésel con biomasa.
Los futuros del maíz y el trigo siguieron a la tendencia de la oleaginosa, con el maíz ganando apoyo por las previsiones de lluvias en el delta de Estados Unidos y el valle del Ohio, según analistas, y el trigo avanzando por la reducción de la superficie en un informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos publicado el lunes.
El contrato de soja más activo Sv1 en la Bolsa de Chicago subía 16,75 centavos a 10,3150 dólares por bushel a las 1638 GMT, tras tocar su punto más alto desde el 6 de marzo. El maíz Cv1 sumaba 4,5 centavos a 4,6175 dólares el bushel, y el trigo Wv1 ganaba 4,5 centavos a 5,4150 dólares el bushel.
La noticia de que una coalición recién formada de grupos petroleros y de biocombustibles, entre ellos el Instituto Americano del Petróleo, se reuniría con funcionarios de la EPA el martes impulsó los futuros de la soja y el aceite de soja, dijo Jim McCormick, socio fundador de AgMarket.net.
La coalición está presionando para que los mandatos de mezcla de diésel de biomasa sean más altos, en el rango de 5.500 millones a 5.750 millones. "Esto supondría un aumento espectacular respecto a los 3.550 millones actuales", dijo McCormick.
El maíz también se vio apoyado por las previsiones a corto plazo de fuertes lluvias en el delta de Estados Unidos y el valle del río Ohio, dijo McCormick.
"Todavía no es un gran problema, pero obviamente no vamos a empezar a sembrar muy rápido en esa parte del país", dijo.
Y en el trigo, los futuros siguieron subiendo impulsados por los datos prospectivos de siembra publicados el lunes por el USDA.
La previsión de siembra estimó la superficie de trigo estadounidense para 2025 por debajo de un rango de estimaciones de los analistas.
Aun así, los mercados de granos se preparaban para el anuncio de aranceles recíprocos del presidente estadounidense Donald Trump el 2 de abril, una perspectiva que sigue generando preocupación por las represalias contra las exportaciones agrícolas estadounidenses, según McCormick.