El S&P 500 registró un máximo del día en 5.854, donde encontró vendedores que llevaron el índice a mínimos del 12 de mayo en 5.742. Actualmente, el S&P cotiza en 5.800, perdiendo un 0.65% en la última jornada de la semana.
A través de una publicación en la red social Truth Social, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mencionó que está recomendando la imposición de un arancel directo de un 50% a la Unión Europea, efectivo a partir del 1 de junio.
Por otro lado, el presidente de la Reserva Federal de St. Louis, Alberto Musalem, mencionó en su discurso del día de hoy, que los líderes empresariales están cada vez más preocupados por las consecuencias económicas ante el aumento generalizado de los precios y la incertidumbre comercial, mostrando su preocupación ante las expectativas inflacionarias hacia el largo plazo.
En este contexto, el S&P 500 cae 38 puntos, firmando su cuarta jornada consecutiva a la baja, en sintonía con los principales índices bursátiles. Las acciones de Deckers Outdoor Corporation (DECK), lideran las caídas en el de S&P 500, perdiendo un 19.86%, visitando mínimos no vistos desde el 4 de abril en 96.10$.
El S&P 500 estableció una resistencia de corto plazo en 5.967, máximo del 19 de mayo. La siguiente resistencia clave se encuentra en 6.145, máximo del 19 de febrero. Al sur, el soporte importante lo observamos en 5.109, punto pivote del 21 de abril.
Gráfico diario del S&P 500
El S&P 500 es un índice bursátil muy seguido que mide el rendimiento de 500 empresas públicas y se considera una medida amplia del mercado bursátil estadounidense. La influencia de cada empresa en el cálculo del índice se pondera en función de la capitalización bursátil. Ésta se calcula multiplicando el número de acciones cotizadas de la empresa por el precio de la acción. El índice S&P 500 ha logrado rendimientos impresionantes: 1.00$ invertido en 1970 habría producido un rendimiento de casi 192.00$ en 2022. La rentabilidad media anual desde su creación en 1957 ha sido del 11.9%.
Las empresas se seleccionan por comité, a diferencia de otros índices en los que se incluyen en función de normas establecidas. Aun así, deben cumplir ciertos criterios de elegibilidad, el más importante de los cuales es la capitalización bursátil, que debe ser igual o superior a 12.700 millones de dólares. Otros criterios son la liquidez, el domicilio, la capitalización bursátil, el sector, la viabilidad financiera, el tiempo de cotización y la representación de los sectores de la economía de Estados Unidos. Las nueve mayores empresas del índice representan el 27.8% de la capitalización bursátil del índice.
Hay varias formas de operar con el S&P 500. La mayoría de los corredores minoristas y plataformas de spread betting permiten a los operadores utilizar Contratos por Diferencia (CFD) para realizar apuestas sobre la dirección del precio. Además, se pueden comprar fondos indexados, fondos de inversión y fondos cotizados (ETF) que siguen la cotización del S&P 500. El más líquido de los ETF es el ETF de la Bolsa de Londres. El más líquido de los ETF es el SPY de State Street Corporation. El Chicago Mercantile Exchange (CME) ofrece contratos de futuros sobre el índice y el Chicago Board of Options (CMOE) ofrece opciones, así como ETF, ETF inversos y ETF apalancados.
Son muchos los factores que impulsan al S&P 500, pero principalmente es el rendimiento agregado de las empresas que lo componen, revelado en sus informes de resultados trimestrales y anuales. Los datos macroeconómicos estadounidenses y mundiales también contribuyen, ya que influyen en la confianza de los inversores, que si es positiva impulsa las ganancias. El nivel de los tipos de interés, fijado por la Reserva Federal (Fed), también influye en el S&P 500, ya que afecta al coste del crédito, del que dependen en gran medida muchas empresas. Por lo tanto, la inflación puede ser un factor determinante, así como otros parámetros que influyen en las decisiones de la Reserva Federal.